De igual manera, el desnudo estaba presente tanto en las artes mayores como en un sinfín de artes menores y objetos, camisetas del real madrid desde candelabros hasta cuchillos y picaportes. Y en ese hospital tuve el corazón 8 segundos en los cuales no se sabe que paso conmigo, pero lo primero que vi enfrente de mi fueron a mis padres, y apretando mi mano y diciendo ‘Aquí estamos’ y yo en ese momento dije ‘Estoy viva, estoy viva’ después de estar pensando tanto tiempo que me iba a morir, y a partir de ahí nació una guerrera, te lo juro, real madrid camiseta una guerrera que ese día dijo ‘Mi vida cambia hoy’».